“Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca.” Apo.1:3
El mensaje a Tiatira
18 Y escribe al ángel de la iglesia en Tiatira: El Hijo de Dios, el que tiene ojos como llama de fuego, y pies semejantes al bronce bruñido, dice esto: 19 Yo conozco tus obras, y amor, y fe, y servicio, y tu paciencia, y que tus obras postreras son más que las primeras. 20 Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que toleras que esa mujer Jezabel que se dice profetisa, enseñe y seduzca a mis siervos a fornicar y a comer cosas sacrificadas a los ídolos.21 Y le he dado tiempo para que se arrepienta, pero no quiere arrepentirse de su fornicación.22 He aquí, yo la arrojo en cama, y en gran tribulación a los que con ella adulteran, si no se arrepienten de las obras de ella.23 Y a sus hijos heriré de muerte, y todas las iglesias sabrán que yo soy el que escudriña la mente y el corazón;y os daré a cada uno según vuestras obras.24 Pero a vosotros y a los demás que están en Tiatira, a cuantos no tienen esa doctrina, y no han conocido lo que ellos llaman las profundidades de Satanás, yo os digo: No os impondré otra carga;25 pero lo que tenéis, retenedlo hasta que yo venga.26 Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo le daré autoridad sobre las naciones,27 y las regirá con vara de hierro, y serán quebradas como vaso de alfarero; como yo también la he recibido de mi Padre;28 y le daré la estrella de la mañana.
Tiatira la Iglesia impenitente
Los ojos de fuego y los pies de bronce vienen a ver y a juzgar, pero esta Iglesia perversa no se arrepentirá. La iglesia tenia obras, servicio y paciencia, pero estaba llena de pecado. Aquí tenemos a Jezabel, la única mujer que se menciona en las siete cartas, refiriéndose a la perversa reina Jezabel, esposa de Acab (1 R16:2-10) Fue una mujer pagana, hija de un sacerdote de Baal; y promovió la adoración a Baal en Israel. Practicaba tanto la prostitución y la hechicería (2R9:22) como la idolatría, el homicidio, el engaño, y el oficio sacerdotal. Y la Iglesia Tiatira estaba siguiendo su ejemplo y liderazgo!.
La recomendación a la iglesia.
Apocalipsis 2:24-25 dice: “Pero a vosotros y a los demás que están en Tiatira, a cuantos no tienen esa doctrina, y no han conocido lo que ellos llaman las profundidades de Satanás, yo os digo: No os impondré otra carga; pero lo que tenéis, retenedlo hasta que yo venga.”
Note como Jesucristo deja a un lado la iglesia dominada por Jezabel, la iglesia papal.
La pone a la vera del camino y se concentra en un grupo dentro de ella, que no se ha contaminado con la doctrina de Jezabel. Durante este período de la iglesia hubo creyentes fieles a la palabra de Dios quienes se resistieron a seguir por el camino de la iglesia papal. Es a estos creyentes a quienes Jesucristo recomienda que se mantengan fieles. La única carga que Jesucristo pone sobre ellos es retener los principios de la palabra del Señor hasta que Jesucristo venga otra vez.
La recompensa
Apocalipsis 2:26-29 dice: “Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo le daré autoridad sobre las naciones, y las regirá con vara de hierro, y serán quebradas como vaso de alfarero; como yo también la he recibido de mi Padre, y le daré la estrella de la mañana. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.”
Los creyentes que se mantengan fieles, sin ceder a la presión de la iglesia corrupta comparada con Jezabel, recibirán como recompensa autoridad sobre las naciones. Esto significa que reinarán con Cristo durante el milenio. Qué interesante.
La iglesia corrupta de esta época, afanosamente buscaba autoridad sobre las naciones, pero jamás la obtuvo. En cambio, los que se mantuvieron fieles a la palabra de Señor recibirán, de parte de Dios, autoridad sobre las naciones. Además recibirán la estrella de la mañana. Juan se encarga de mostrar que la estrella de la mañana es Jesucristo mismo. Apocalipsis 22:16, en palabras de Jesucristo leemos lo siguiente: “Yo soy la raíz y linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana”
El periodo de las densas tinieblas en las cuales se sumió la iglesia corrupta, tiene su fin. No será siempre así. Antes del fin, aparecerá Jesucristo, la estrella de la mañana, para llevar a los verdaderos creyentes a estar siempre con él. En este pasaje hemos visto un mensaje severo para una iglesia corrupta. Quiera Dios que las advertencias y las amonestaciones nos hagan meditar a todos en la necesidad de mantenernos fieles a los sencillos principios de la Biblia, sin ceder a las presiones de comprometer la fe para obtener poder mundano.